Páginas

jueves, 31 de octubre de 2013

A la rica calabaza!

¡Me encantan todas!
Hoy es día de calabaza! Y no porque sea Halloween ni nada de eso, que desde siempre el otoño nos da la posibilidad de disfrutar de esta maravilla que podemos cocinar de muy diversas formas. Del mismo modo, encontramos buena variedad de ellas, como la calabaza "totanera" que llamamos en Murcia, y que es super dulce (al horno es un vicio para mi), la Potimarrón o de Hokaido (con un agradable sabor que recuerda a la castaña) o la calabaza "pera", que para cremas y cocinados aporta una textura perfecta. Hay muchísimas más, que depende mucho de la zona dónde vivas también, pero éstas son las tres que más suelo utilizar.
 
Así que hoy, coincidiendo con que todo el mundo estará lleno de calabazas, yo voy a darle mi pequeño homenaje con este post. Os dejo una serie de recetas con ellas para que las disfrutéis.
 
 
 
 
CALABAZA DE HOKAIDO RELLENA DE AZUKIS
 
Ingredientes: (para 4 personas)
  • Una calabaza de hokaido mediana.
  • 60 g de Azukis, puestas en remojo la noche anterior con alga kombu (también podéis utilizar soja negra).
  • 50 g de Arroz integral.
  • 2 puerros.
  • Aceite de oliva o sésamo.
  • Sal marina.
  • Tamari
  • Perejil fresco.
 
Elaboración:
1. Ponemos a asar la calabaza partida en dos de manera vertical, para que queden dos partes lo más "chatas" posible. El horno a unos 180º - 200º durante aproximadamente una hora (dependerá de tu horno). Para saber si está bien cocinada podéis pincharla.
 
2. Al mismo tiempo, preparamos las azukis que habremos tenido en remojo durante la noche anterior. Primero de todo, picamos el puerro entero, lo blanco y lo que podamos aprovechar del verde también, y lo sofreímos brevemente con una pizca de aceite de oliva o sésamo. Añadimos las azukis, el arroz integral, el alga kombu, agua y una poca sal marina para su cocción (no demasiada ya que añadiremos tamari después). Cocemos durante 45 minutos a fuego suave. Cuando queden 5 minutos para finalizar, añadimos un chorrito de tamari al gusto para dar sabor. Reservar.
 
3. Vamos a comprobar cómo está nuestra calabaza, y cuando esté lista, le quitamos las pepitas o semillas (que podemos guardar para utilizarlas) y procedemos a rellenarla con el guiso. La metemos unos minutos más al horno para que la calabaza absorba el sabor del guiso también a través del caldito que suelte.
 
4. Para servir, espolvoreamos con perejil fresco.
 
 
 
 
CREMA DE CALABAZA Y CANELA
 
Esta receta suelo hacerla con la calabaza tipo pera, aunque con la "totanera" sale con un dulzor especial.
 
Ingredientes: (para 4 personas)
  • 500 g de calabaza.
  • Dos cebollas medianas.
  • Aceite de oliva.
  • Sal marina.
  • Una rama de canela.
 
Elaboración:
 
1. Pelamos la calabaza y la cortamos en cubos. Troceamos las cebollas.
 
2. Ponemos en una cazuela un poco de aceite y pochamos a fuego lento las cebollas para ir sacando su dulzor poco a poco. Para esto, las ponemos con el fuego medio y empezamos a sofreírlas, removiendo de abajo a arriba de vez en cuando. Cuándo empiecen a ponerse transparentes añadimos sal marina, tapamos y bajamos el fuego al mínimo para cocinar un poco más unos 10 o 15 minutos, pero con cuidado que no se queme ni se dore.
 
3. Cuando esté hecha añadimos la calabaza, la rama de canela entera y agua que no cubra del todo. Ponemos otra poca sal marina y cocemos durante unos 20 minutos.
 
4. Para acabar, sacamos la rama de canela y trituramos todo. Servimos caliente y si os apetece, espolvoreáis una pizca de canela más por encima.
 
 
 
 
 
RECETA DE PAN DE CALABAZA
 
Esta receta la he adaptado de una que encontré buceando por internet en www.hogarutil.com
 
Ingredientes:


  • 500 gr de calabaza troceada (pelada  y sin semillas)
  • 2 cucharaditas de levadura seca de panadería o 15 gr de levadura fresca.
  • 2 cucharaditas de melaza de arroz
  • 300 gr de harina integral de espelta
  • 200 gr de harina de manitoba
  • 2 cucharaditas de sal marina
 
Elaboración:
 
1. Poner a cocer a fuego suave la calabaza troceada con un poco de sal marina durante 20 minutos. Escurrir muy bien pero reservar el agua de cocción. Tritura la calabaza bien y déjala enfriar.
 
2. Pon la levadura en 60 ml del agua de cocción reservada, pero cuida que no esté muy caliente sino templada. Deja reposar cinco minutos para que se disuelva bien y añade después las cucharaditas de melaza y mezcla bien.
 
3. En un bol, pon las harinas y la sal marina, mezcla bien, haz un agujero en el centro, y añade la mezcla anterior y la calabaza triturada. Empieza a mezclar, amasando poco a poco, hasta conseguir una masa espesa y pegajosa (si es necesario, añade alguna cucharada más de agua de la cocción). Continua amasando hasta que puedas conseguir una masa homogénea y elástica, y entonces cúbrela con un paño y déjala reposar en un lugar cálido durante una hora - hora y media, o hasta que doble su volumen.
 
4. Coge de nuevo la masa, golpéala un poco para sacarle el aire, y da forma al pan sobre la bandeja del horno pincelada con un poco de aceite para que no se pegue la base. Haz algún corte si quieres arriba, y cúbrela de nuevo para reposar otra hora. También puedes esparcir semillas de calabaza por encima antes de hornear.
 
5. Finalmente, hornea a 220º durante unos 40 minutos, hasta que el pan tenga un color dorado y suene hueco al golpear la base.  

domingo, 20 de octubre de 2013

Ensalada de azukis y alpicoz

En la entrada de hoy os estaréis preguntando qué es este misterioso ingrediente que me saco hoy de la manga... Alpicoz... Así, tan raro como suena... Me encantaría saber que posibles cosas se os están pasando por la cabeza en este momento...
 

Aquí os presento al Alpicoz
Pues bien, el alpicoz es algo muy de mi tierra, Yecla, en la zona del Altiplano al norte de la Región de Murcia. Es muy apreciado en verano, en esos meses de calor seco que tenemos por esta zona, y es que su composición es prácticamente agua. ¿Por qué? Pues porque esta verdura viene de la misma familia que los pepinos, y al igual que estos, refresca que da gusto! La principal diferencia es que el alpicoz es más digestivo (no se repite como el pepino), se come con la piel, y tiene un sabor más dulce y fresco que el pepino. Que os voy a contar yo, a mi me parece mucho más bueno! En los campos de mi tierra es una planta que prácticamente todo el mundo cultiva en sus huertos de verano, y la gran mayoría son ecológicos ya que no necesitan más que agua y sol para crecer estupendamente.
 
Así que si algún día venís en temporada cálida por estas tierras, no dejéis de probarlo. Creo que en alguna zona de Alicante también se cultiva pero lo llaman Alficoz.
 
Mi receta de hoy, no es más fácil porque no se puede, pero el sabor dulce del alpicoz con la azuki queda espectacular. Si lo acompañáis con algún cereal (arroz basmati, quinoa...) y algo de verdura os queda un plato equilibrado y completo.
 
Ingredientes: (para 4 personas)
  • 250 g de azukis, remojadas la noche anterior con alga kombu.
  • Dos alpicoces.
  • Una cebolleta.
  • Hierbabuena fresca.
  • El zumo de medio limón.
  • Aceite de oliva de calidad.
  • Sal marina.
  • Rábano, para acompañar.
Elaboración:
1. Ponemos a cocer las azukis con la kombu y un poco de sal marina, durante aproximadamente 45 minutos, hasta que queden blandas pero no deshechas. Colamos y dejamos enfriar. El caldo de la cocción podéis tomarlo como un té, ya que es excelente para dar un chute de energía a nuestros riñones.
2. Mientras, picamos muy fina la cebolleta, lavamos bien el alpicoz y lo picamos también, y picamos la hierbabuena.
3. Mezclamos todos los ingredientes picados con las azukis, y aliñamos con el aceite de oliva y el zumo de medio limón. Mezclamos bien para que se impregne todo del aliño.
4. Servimos fresquita acompañadas de unos pickles rápidos de rábano.


lunes, 7 de octubre de 2013

Tortitas o pancakes de amasake (sin leche, sin huevo, sin azúcar)


Hoy quiero dejaros en el blog esta magnífica receta de pancakes o tortitas, de la Seishoku Macrobiotic Association. Es una receta macrobiótica y vegana, ya que no utiliza ningún alimento derivado de animales y la base es el amasake que tiene muchas propiedades y es muy utilizado en la dieta macrobiótica. También es ideal para las personas que presentan alergias o intolerancias al huevo, el azúcar o los lácteos, o que simplemente no quieren tomarlos.  La receta os la dejo traducida del inglés y con las variaciones que yo he hecho. Es un estupendo desayuno o merienda para tomar en un día especial o para darnos un rico y dulce capricho.
Que las disfrutéis!

Ingredientes: (para 6 tortitas)
- 150 g de harina de arroz o espelta integral
- 200 ml de Amazake de mijo (yo puse de arroz)
- 100 ml de agua (yo puse leche de arroz, para darle más dulzor)
- 5 cucharadas de pasas (yo puse dos solamente, y para mi gusto estaba bien así)
- Una cucharadita de sal marina sin refinar
- Aceite de oliva virgen extra
- Melaza de arroz o algún sirope

Preparación: (unos 15 - 20 minutos)

1. Mezclamos el amasake con el agua o leche de arroz.

2. En un bol, ponemos la anterior mezcla junto con las pasas, la sal y la harina, poco a poco, para ir mezclándolo todo bien hasta conseguir una pasta espesa.

3. Calentamos una sartén que no se pegue, pintamos con un poco de aceite de oliva y ponemos 1/6 de la mezcla para que salgan seis tortitas. Se extienden y dan forma en la sartén, a fuego medio, y cuando se despeguen (en un par de minutos) podemos darles la vuelta (yo no los hice muy gruesas para que cocieran bien por dentro también). Os recomiendo pincelar la sartén con un poco aceite cada vez que pongáis una tortita nueva.
 
 
4. Para servir podéis poner un poco de melaza de arroz, sirope, crema de algarroba o alguna compota o mermelada casera por encima.
 

viernes, 4 de octubre de 2013

Risotto de shitakes - Un guiño a Italia


La entrada de hoy es un pequeño guiño a este país que tanto me gusta. Reconozco que el risotto es un plato delicado y al mismo tiempo muy sabroso, aunque verdaderamente el exceso de queso o mantequilla con el que se suele realizar ya hacía que me tirara para atrás. Después, cuando retiré completamente los lácteos de mi dieta (que buena elección!) automáticamente dejé de pensar en este tipo de arroz y esa textura melosa que lo hace tan especial.
Así que  como me gusta adaptar recetas, encontré la manera de realizar este arroz sin lácteos de ningún tipo, pero con un sabor especial que le da la seta shitake.
 
Espero que os guste!
 
Ingredientes: (para 4 raciones)
- 350 g de arroz integral de grano corto
- leche de avena
- Kuzu, o en su defecto maicena de cultivo biológico. También podéis utilizar una crema de arroz, avena o mijo para cocinar.
- Setas shitakes al gusto (yo suelo poner dos o tres por persona)
- Champiñones, unos pocos nada más.
- Una cebolla bien picada.
- Sal marina sin refinar.
- Aceite de sésamo.
- Pimienta negra recién molida.
- Anacardos remojados unas horas y picados (opcional).
 
Preparación:
 
1. Picamos la cebolla y salteamos en una cacerola con una pizca de aceite de sésamo. Cuando esté dorada, añadimos en trocitos las setas shitake y unos pocos champiñones. No hay que hacerlos mucho tiempo, un salteado rápido.
2. Cuando están listas las setas, añadimos el arroz integral y tres medidas más de agua. Salamos al gusto y dejamos cocer durante aproximadamente 30 minutos, hasta que se esté quedando sin caldo.
3. Mientras tanto, diluimos en un vaso pequeño de leche de avena, una cucharada sopera de kuzu o maicena, y cuando veamos que el arroz se ha quedado prácticamente sin líquido, añadimos esta mezcla. Añadimos una pizca de pimienta negra recién molida y si añadís los anacardos para dar un toque más a sabor de queso. Rectificamos de sal.
4. Terminamos de cocinar removiendo poco a poco, hasta que se haya absorbido la crema y el arroz quede meloso.
5. Decoramos con alguna seta entera, y un poco perejil.

Blogging tips